Alteridades de ida y vuelta

Resumen

En los últimos años José Antonio González Alcantud ha ido desarrollando una interesante reflexión a propósito de las relaciones entre la identidad y la alteridad. Se ha centrado en aquellos casos en los que ambas se confuden y se entremezclan, de manera que las fronteras entre la una y la otra se vuelven también difusas. Lo propio se proyecta sobre lo ajeno y lo ajeno sobre lo propio. Todo ello nos obliga a hacer gala de una sutilidad superior a la acostumbrada. Los análisis más clásicos, basados en la contraposición tajante con respecto al otro resultan ser entonces demasiado simples. El examen de las relaciones entre el mundo hispano y el mundo magrebí resulta muy apropiado para entender toda esta dinámica, ya que, por mediación de lo andalusí, lo magrebí se inserta dentro de lo hispano, como una parte irrenunciable del mismo, al tiempo que se le contrapone como la máxima manifestación histórica de lo extraño y de lo hostil. Así nos lo demuestra la historia del estilo hispano-morisco, construido a partir de la visión orientalizante de lo andalusí, convertido en un cuasi-estilo nacional español y utilizado luego por parte de las autoridades francesas como un modelo con el que modernizar las artes del Marruecos colonial.