Martínez Delgado, José (ed.), (2011) El viaje lingüístico de la Biblia, Granada: EUG, 352 pp. ISBN 978-84-338-5315-8

Aurora Salvatierra Ossorio

aurora@ugr.es
Universidad de Granada

Se propone este volumen el objetivo de dar a conocer todo el potencial lingüístico de la Biblia, presentando este texto como un elemento de referencia para un interesante corpus de estudios sobre tradiciones literarias y lingüísticas que le preceden o le siguen en el tiempo. Para ello el editor ha reunido las aportaciones de un destacado grupo de especialistas que han sabido aunar el rigor científico de sus contribuciones con el esfuerzo por hacerlas accesibles a un público amplio no necesariamente ceñido al ámbito de conocimiento de las culturas semíticas. El hecho de que en el origen de este trabajo se encuentre un seminario dedicado a las lenguas y textos sagrados, celebrado en Granada en 2009, ha facilitado el carácter multidisciplinar de la obra así como la diversidad de los lectores que pueden disfrutar de ella.

El viaje lingüístico que se nos propone está enmarcado por dos aportaciones que le sirven de marco: F. Corriente («Lenguas y textos sagrados: consideraciones ilustradas») abre este volumen con una serie de reflexiones personales sobre los problemas que ha venido suscitando (y suscita) el estudio de las lenguas y los llamados textos sagrados;
J. Trebolle Barrera lo cierra con «Los manuscritos bíblicos del Mar Muerto. La historia y crítica del texto de la Biblia después de Qumrán» donde revisa la historia de los textos bíblicos aquí hallados y aborda cuestiones clave para el conocimiento de este corpus (desde la pluralidad de ediciones a la clasificación por géneros, pasando por los trilingüísmos bíblicos).

Dos grandes bloques temáticos, Los orígenes de la Biblia y El viaje lingüístico de los textos sagrados, estructuran el resto de los capítulos. En la primera sección L. Miralles Maciá («Una aproximación a la Biblia Hebrea: cuestiones generales y un ejemplo práctico») ofrece una introducción a aspectos básicos de este texto (lengua, canon, transmisión, etc.), lo sitúa en su contexto cultural, el Próximo Oriente Antiguo, y ofrece una muestra de su propuesta de análisis a través del estudio de Jueces 9, 8-15. Por su parte J. A. Zamora en «Religión y lenguas fenicias» se ocupa de la lengua utilizada en la perdida literatura religiosa fenicia tratando de abrir «ventanas epigráficas» que iluminen la cuestión. A. Urbán centra su trabajo en «La versión griega de los lxx y el griego del Nuevo Testamento»; ilustra su presentación con el estudio de algunos pasajes neotestamentarios para finalizar con una reflexión sobre el papel de la tradición. Con J. Vazquez Allegue nos introducimos en «Qumrán y la literatura apocalíptica» con una presentación general del tema a la que sigue una presentación más detallada de la corriente apocalíptica y su dimensión escatológica así como un recorrido sobre el desarrollo de este género en la literatura intertestamentaria. Se cierra esta sección con «Usos del texto bíblico en la literatura rabínica: leyendo la tradición con los sabios», con el que O. Ruiz Morell se adentra en la lectura rabínica de la Biblia y repasa la actividad exegética de las distintas escuelas, la lengua utilizada o los principios hermenéuticos más frecuentes. Sus observaciones se acompañan de casos prácticos que resultan muy clarificadores.

La segunda parte del volumen se abre con el trabajo de J. Ferrer sobre «El mundo de las versiones arameas de la Biblia» donde nos acerca al corpus y la problemática de estas traducciones del texto bíblico y al singular universo literario que crean. Seguidamente, J. P. Monferrer Sala se ocupa de la «Biblia en árabe: entre el texto y sus contextos». Su artículo repasa la producción textual de los autores cristianos a partir de tres grandes periodos históricos (preislámico, preotomano y otomano), presentado lo textos más significativos así como la situación textual y lingüística de esta producción cristiana en árabe. El judeo-árabe como otra de las lenguas a las que se vierte el texto sagrado es el objeto de estudio de M.ª A. Gallego («De Saˁadia al Šarḥ: traducciones de la Biblia al judeo-árabe») quien repasa, siguiendo un criterio cronológico, la historia de estas traducciones entre las que se destaca la realizada por Saˁadia Gaón en el siglo x. J. Martínez Delgado trata en «La revitalización del hebreo bíblico en la Edad Media» la cuestión del comparativismo de las lenguas semíticas (hebreo, arameo, árabe) en este periodo. En su artículo analiza las causas que explican este fenómeno, revisa los principales focos y autores que recurren a este sistema de análisis y ofrece algunos casos prácticos de este enfoque lingüístico.

Las versiones coptas y etiópicas de la Biblia protagonizan los dos siguientes trabajos. M. J. Albarrán Martínez ofrece una panorámica de la actividad de la traducción a la lengua copta en sus distintas etapas, presentando el uso y circulación de estos textos bíblicos, sus rasgos generales y las versiones más relevantes de este corpus. De la adaptación de la Biblia al etiópico se ocupa J. M. Cañas Reíllo quien expone el valor textual y literario de estas versiones que constituyen el ejemplo más antiguo de las traducciones bíblicas a culturas periféricas. Tras una introducción general a las peculiaridades de estos escritos, se centra el autor en la versión al gueez, la más antigua de este grupo y la de mayor relevancia en Etiopía desde el s. iv hasta el xix. En un último capítulo, P. A. Torrijano nos ilustra acerca «El armenio y sus textos bíblicos». Para ello repasa la situación geográfica, la historia y el alfabeto de los armenios y la descripción de su lengua para, seguidamente, exponer diversos aspectos de la traducción de la Biblia en esta cultura.

Al concluir la lectura de este libro, sorprende gratamente la variedad de temas, enfoques y reflexiones que se proponen pues son muchas las posibilidades de estudio del texto bíblico que quedan al descubierto a lo largo de estas páginas. Los trabajos que aquí se reúnen constituyen en su diversidad una enriquecedora mirada a la Biblia.
La solidez investigadora de quienes participan en este volumen, su profundo conocimiento de las cuestiones que se abordan dotan a este texto de una indudable calidad al tiempo que su heterogeneidad lo convierte en una obra de gran utilidad para destinatarios con formación e intereses diversos. Basta revisar los apéndices y la bibliografía final para encontrar un completo muestrario de los «paisajes» que en este viaje a través de la Biblia y sus lenguas se nos invita a recorrer.