Carbajosa, Ignacio (ed.), (2012) El Rollo de Ester de la Catedral
de Madrid. Edición facsímil,
Madrid: Universidad San Dámaso
y Cabildo Catedral Metropolitano de Madrid, 48 pp.
ISBN 978-84-15027-31-7

Purificación Albarral

purialbarral@gmail.com

El libro que reseño consta de dos partes.

La primera parte, plegada y sin paginar, contiene una reproducción facsimilar de una bella y rica Meguilat Ester (‘Rollo de Ester’) iluminada, escrita en hebreo, que se conserva en la Catedral de Nuestra Señora de la Almudena de Madrid, como parte del legado del erudito José Fernández Montaña (1842-1935).

La segunda parte contiene los siguientes apartados: dos prólogos —el primero (pp. 4-5) escrito por el Cardenal Arzobispo de Madrid, D. Antonio M.ª Rouco Varela; y el segundo (pp. 6-7), por el Rector de la Universidad Eclesiástica San Dámaso, D. Javier M.ª Prades López—; un «Estudio y descripción del manuscrito», realizado por Ignacio Carbajosa, en español (pp. 9-22) y en inglés (pp. 23-29); un relato de José Jiménez Lozano, titulado «El paseante, o Ester recontada» (pp. 31-37); y una «Versión ladina del libro de Ester según la Biblia de Ferrara (1553)» (pp. 39-48).

El «Estudio y descripción del manuscrito», se divide en cuatro apartados.

En el primero (pp. 9-12) el autor menciona algunos datos de la biografía intelectual del Padre Fernández Montaña y da cuenta de otros manuscritos del Rollo de Ester en hebreo que se encuentran en España.

En el segundo (pp. 12-14) ofrece una información básica sobre «La costumbre del rollo sinagogal»; menciona, por ejemplo: el lugar que ocupa el Rollo en el conjunto de la Biblia hebrea, su uso sinagogal, días de celebración de la fiesta de Purim, etc.

En el tercero (pp. 14-21) realiza una descripción rigurosa del manuscrito, subdividiendo el apartado en tres secciones: «Características generales» (pp. 14-15), «El texto hebreo» (pp. 16-19) y «Decoración» (pp. 20-21). La descripción va acompañada de varias ilustraciones: manuscrito enrollado, costura que une dos hojas del pergamino, etc.

Discrepo con el autor en lo que se refiere a su transcripción de palabras hebreas. Considero más coherente, según el sistema de trascripción de la Escuela Española de Estudios Sefardíes, adoptado por la revista Sefarad (CSIC, Madrid) y expuesto con detalle por Iacob M. Hassán en «Transcripción normalizada de textos judeoespañoles», Estudios Sefardíes 1 (1978), pp. 147-150, en un estudio escrito en español, transcribir, por ejemplo, Meguilá y no Megillah (p. 12), parašiyot y no parashiyyot (p. 16), setumot y no setumôt (p. 16) y «yabó hamélej veHamán hayom» (Est 5:4) y no «ybwʾ hmlk whmn hywm» (p. 18) que impide la más elemental lectura al no hebraísta.

En el cuarto apartado (pp. 21-22) expone las razones que le han llevado a situar y datar el manuscrito en la Italia de la primera mitad del siglo xvii, sin descartar la segunda mitad del xvi.

Al estudio que acabamos de mencionar, escrito en español (pp. 9-22), sigue su versión en inglés (pp. 23-29).

El libro continúa con un cuento basado en Ester de José Jiménez Lozano (pp. 31-37), donde echo en falta alguna alusión a las muchísimas leyendas que giran en torno al relato bíblico en la literatura midrásica, como por ejemplo, que Vastí se negó a presentarse desnuda ante Asuero y sus comensales (Est 1:12) porque le brotó lepra o porque vino Gabriel y le hizo crecer un rabo (El relato completo que recoge estas dos posibilidades está traducido en Elena Romero, La ley en la leyenda. Relatos de tema bíblico en las fuentes hebreas (Madrid: CSIC, 1989), p. 568.

Se termina el libro con una «Versión ladina del libro de Ester según la Biblia de Ferrara (1553)» (pp. 39-48). Entiendo que con ladina el autor se refiere a ladinada, es decir, traducida, porque lo que dice la portada de la Biblia de Ferrara es «Biblia / En lengua Española traduzida palabra / por palabra dela verdad Hebrayca / por muy excelentes letrados vis/ta y examinada por el officio / dela Inquisicion», según copio de la edición facsímil de la Biblia de Ferrara editada por Iacob M. Hassán (Madrid: Ediciones Siruela, 1992), versión que figura digitalizada de la Biblioteca virtual de la Fundación Ignacio Larramendi.

Precede a este texto una breve introducción (p. 39), que tiene un erróneo comienzo —«El ladino o judeo-español es la lengua romance que utilizaban los judíos sefardíes en España»— y una gran ausencia.

Respecto a lo primero, conviene aclarar que el judeoespañol o sefardí es la lengua que hablan los sefardíes; y que sefardí es todo descendiente de los judíos que salieron de los reinos hispanos medievales a fines de la Edad Media. A los judíos que vivieron en la España medieval se les denomina hispanojudíos y sus lenguas fueron el árabe y los distintos romances locales, dependiendo de su lugar de residencia.

En relación a lo segundo, a la ausencia, me ha sorprendido que no figuren los nombres de los dos traductores de una Biblia tan importante para judíos y para cristianos. Se trata de Yom-Tob Atías (Jerónimo Vargas) y Abraham Usque (Duarte Pinel), quienes firmaron con el nombre judío o con el cristiano dependiendo de a quienes iban dirigidos los ejemplares.

Para terminar, hay otro importante dato que no se indica, lo que impide saber qué versión de la traducción española de Ferrara se reproduce, ya que no se hace constar la fuente de la que se ha copiado el texto ferrarense. Desde luego no se ha podido copiar de una versión original de Ferrara de 1553, porque, entre otras cosas, el original no lleva tildes. Así en Est 1:1, Ferrara dice dias, el, reynan (h. 397r) y el texto copiado que aquí editan dice días, él, reynán. Tampoco de la edición no facsímil de Moshe Lazar, Biblia de Ferrara (Madrid: Ediciones de la Fundación José Antonio de Castro, 2004), p. 1275, porque difiere en la lectura de algunas palabras. En el mismo Est 1:1, Lazar escribe reinán, veinte y el texto copiado dice reynán, veynte.

Para terminar, considero que es útil y necesario poner en conocimiento de expertos y del público en general este tipo de manuscritos, pero, a la hora de añadir complementos, se debería ser más exactos y precisos en lo que se dice para no llevar a equívocos al lector no especializado.