Wacks, David (2015), Double Diaspora in Shephardic Literature. Jewish Cultural Production Before and After 1492. Bloomington & Indianapolis: Indiana University Press. 298 pp. ISBN: 978-0-253-01572-3.
Aurora Salvatierra Ossorio
aurora@ugr.es
Universidad de Granada
La nueva monografía de David A. Wacks nos acerca a la literatura hebrea de los siglos XIII- XVI tomando como clave de su análisis el concepto de “doble diáspora” y su reflejo en los textos de autores sefardíes que “are Jewish in Spain and Spanish abroad” (p. 2). Se trata de una perspectiva que implica, como el libro pone de relieve, una constante negociación entre la conciencia de pertenencia originaria a Sión y la vida en la España medieval (y después fuera de ella). Y en consecuencia, una compleja elección de lenguas, géneros y modelos culturales de quienes construyen un imaginario que comprende el exilio de la Tierra Santa pero también el de al-Andalus o la Península Ibérica.
Para abordar esta cuestión, el autor propone eliminar la frontera que tradicionalmente se establece entre el periodo anterior y posterior a 1492. Con esta visión global se borra una ruptura artificial entre la cultura sefardí pre-expulsión y post-expulsión y se permite el diálogo entre estos dos mundos. Esta postura es, en mi opinión, uno de los grandes aciertos del libro. Pero no es este límite temporal el único que trata de suprimirse: también hay un esfuerzo por llenar el espacio que se abre entre medievalistas e investigadores de la modernidad, entre los estudiosos de las literaturas de ámbito romance y los de quienes se ocupan de la literatura hebrea. Afortunadamente no es el de Wacks el primer intento en esta línea ya defendida, entre otros, por A. Sáenz Badillos o J. Decter. Pero no está demás insistir en esta perspectiva de trabajo que sin duda supone un enriquecimiento para romanistas, hispanistas y hebraístas.
El libro se inicia con una presentación de los postulados teóricos que sustentan el estudio (Diaspora Studies for Sephardic Culture). Wacks defiende un concepto amplio de diáspora en línea con las ciencias sociales que han aplicado esta idea a un campo de experiencias extenso (armenios, africanos, chinos, etc.) Se parte de una revisión de grandes hitos del pensamiento judío sobre el término galut y se subrayan los valores que los análisis de diásporas no judías pueden aportar. Tras un recorrido por la evolución del término “diáspora” (Safran, Bauman, Mishra o Clifford), el autor opta por tomar como base de su trabajo a Khachig Tölöyan, especialista en diáspora armenia y el paradigma de análisis que se propone (p. 11).
El capítulo incluye una revisión crítica del galut en la historiografía judía como plan divino (Baron, Baer) así como otras miradas a la historia judía articuladas en torno a este concepto (Funkenstein o D. y J. Boyarin). Las propuestas contemporáneas se conjugan con el análisis de las visiones medievales de personalidades como Ḥasday ibn Shaprut, Yehudah ha-Levi o Maimónides.
Si bien el marco teórico queda bien establecido, a lo largo de la obra se recurre a otras propuestas metodológicas (como las basadas en el `imperio´, en especial a partir del cap. 6) que merecería la pena mencionar. Hubiera sido deseable, igualmente, precisar en este capítulo introductorio el sentido y significado que se da a los términos “Spain”, “Spanish authors” “Shephardics writers” o “sephardic culture”, entre otros, conceptos que pueden resultar ambiguos en su empleo y crear confusión respeto a otros usos de los mismos ya establecidos.
En los siguientes seis capítulos analiza Wacks cómo diversos escritores sefardíes muestran su conciencia de diáspora (o “doing diaspora”, p. 32) en sus elecciones estéticas, lingüísticas y discursivas. En su opinión, la cultura tradicional judía es una performance de la diáspora y como tal tiene su propio imaginario.
En estos ensayos que constituyen el cuerpo de la monografía destaca el esfuerzo por establecer una continua interrelación entre lenguas, literaturas y poderes y por presentar a la comunidad judía en diálogo con sus contemporáneos que escriben en árabe, provençal o latín, entre otros.
Cuatro autores anteriores a 1492 inician esta serie de estudios: Jacob ben Eleazar, Todros Abulafia, Shem Tov de Carrión y Vidal Benvenist. Con el primero de ellos (Allegory and Romance in Diaspora: Jacob ben Elazar´s Book of Tales), se da voz a las preocupaciones de una comunidad `diaspórica´ en un proceso de transición entre dos culturas dominates: la árabe y la romance. La elección del hebreo como lengua literaria y del debate como modelo de expresión se presentan aquí como estrategias propias de la diáspora al combinar la literatura hebrea andalusí con estilos emergentes en lenguas romances. Algunas interpretaciones de los textos, como la visión de la espada como imagen de la soberanía cristiana que supone una amenaza política y religiosa en forma de Trinidad (p. 53), resultan discutibles pero al tiempo sugerentes. En Poetry in Diaspora: From al-Andalus to Provence and Back to Castille, se cede el protagonismo a Todros Abulafia, quien vive en una doble diáspora “one human and one poetic” (p. 64). Y es precisamente la combinación de la poética andalusí y la poesía trovadoresca, explica Wacks, lo que ha llevado a este autor a ser excluido de los estudios de los trovadores y a no ser suficientemente atendido en las investigaciones en torno a las letras hebreas medievales. En este capítulo se recupera a Abulafia como un mediador entre la cultura propia y la del lugar de residencia, como reflejo de una lealdad simbólica a las culturas literarias de la Iberia Medieval y al imaginario de la diáspora de Sión. Shem Tov de Carrión centra la atención en The anxiety of Vernacularization: Shem Tov ben Isaac ibn Ardutiel de Carrion´s Proverbios morales and Debate between the Pen and the Scissors. Ahora se nos presenta a un creador que refleja la dificultad de, siendo miembro de una minoría religiosa, escribir sobre asuntos morales y, además, hacerlo en una lengua romance en uno de sus textos. Wacks propone una lectura novedosa al considerar Proverbios morales y el Debate de manera conjunta como una muestra de la tensión que la elección de la lengua supone y de sus consecuencias. La lucha entre el sometimiento a la autoridad (y el uso del castellano) y, a un tiempo, la resistencia al empleo de una lengua vernácula son un interesante ejemplo de cómo se negocia la diferencia cultural en un contexto de diáspora. Con Vidal Benvenist (Diaspora as Tragicomedy: Vidal Benvenist´s Efer and Dina), nos acercamos a una historia trágica de amor, que remite a las parodias en torno a Purim pero recurre a las formas de la narrativa europea. Escrita en hebreo, en ella resuenan, no obstante, contenidos y materiales de las literaturas contemporáneas en lenguas romances (Libro de Buen Amor, Celestina). Wacks ve en Efer y Dinah elementos que simbolizan la situación difícil de la comunidad judía de Zaragoza en el S. XV, circunstancia que no supone aislamiento de esta minoría con respecto a la cultura dominante.
En los capítulos 6 y 7 la expulsión ya se ha producido pero se evita que 1492 rompa el continuum literario y cultural hebreo. En Empire and Diaspora: Solomon ibn Verga´s Shevet Yehudah and Joseph Karo´s Maguid Meisharim acompañamos a dos personajes nacidos en la Península que abandonan Sefarad siendo jóvenes. A través de sus obras se analizan los nuevos modos entender la experiencia de la doble diáspora y el modo en que se configura una nueva identidad con el fenómeno converso como elemento clave. Ibn Verga reacciona a los acontecimientos de su tiempo con una crónica historiográfica que asume los principios de los humanistas del XVI, Karo opta por asumir que una decisión divina por los pecados explica la expulsión. Dos modos, pues, de afrontar este nuevo exilio.
Jacob Albalag (Reading Amadis in Constantinople: Spanish Fiction in the Key of Diaspora) cierra el estudio. Esta vez es el ideal caballeresco el que se adapta a una audiencia judía. A través de la traducción/versión de Albalag, Amadís se ajusta al gusto sefardí de la Constantinopla del s. XVI: el héroe se descristianiza pero, al mismo tiempo, el texto permite reconocer elementos de las literaturas romances que retrotraen a la Iberia Medieval. De este modo, un personaje y sus aventuras se transforman en el nuevo contexto pero se mantienen sus lazos con un legado previo a 1492.
A través de este recorrido por textos muy diversos, Wacks va trazando una imagen compleja de la comunidad sefardí (como él la define) que no se interrumpe con los acontecimientos de 1492. En su monografía cobra forma una identidad `transnacional´ en la que sus protagonistas emplean distintas estrategias para dar voz a una experiencia que, en una constante interacción de culturas y poderes, les obliga a redefinirse como sujetos de una minoría. Nuestra compresión de las diásporas y su expresión artística es, sin duda, más dinámica y enriquecedora después de la lectura de estas páginas.