Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
451
TIC EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR PARA SOLVENTAR
UNA CRISIS SANITARIA
ICT in higher education to solvent a health crisis
Martha Patricia Astudillo Torres
patricia.astudillo@unach.mx
https://orcid.org/0000-0002-9013-6467
Universidad Autónoma de Chiapas (México)
Recibido: 14/07/2021
Evaluado: 01/11/2021
Revisado: 21/12/2021
Aceptado: 22/120/2021
Resumen
El artículo expone los resultados de una investigación realizada en una
Institución de Educación Superior mexicana, la cual tiene por objetivo explicar
el proceso de enseñanza y aprendizaje llevado a cabo desde la virtualidad
total, durante el periodo de confinamiento ocasionado por la pandemia de la
enfermedad Covid-19, desde la opinión de estudiantes del área de ciencias de
la computación. La metodología aplicada corresponde a la perspectiva
interpretativa, guiada por los supuestos del estudio de casos en el que se
emplea la entrevista en profundidad, el grupo focal y el análisis de contenido
como técnicas de recogida de información; de igual manera, las técnicas de
análisis aplicadas giran en torno a la suma categórica, la correspondencia y
modelos y las generalizaciones naturalistas. Los principales hallazgos señalan
que, aunque las Tecnologías de la Información y la Comunicación han sido el
soporte para dar continuidad al proceso educativo, mediante la educación
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
452
virtual y en línea, los estudiantes manifiestan que estas modalidades no les han
permitido alcanzar un aprendizaje significativo tomando en cuenta la
elaboración de tareas, las clases virtuales, el entendimiento del tema, el
progreso y el seguimiento de su formación profesional; particularmente, de
aquellos estudiantes que se encuentran en entornos vulnerables,
evidenciándose el aumento de la brecha digital en estos contextos.
Abstract
The article presents the results of an investigation carried out in a Mexican
Higher Education Institution, which aims to explain the teaching and learning
process carried out from total virtuality, during the period of confinement caused
by the Covid disease pandemic -19, from the opinion of students in the area of
computer science. The applied methodology corresponds to the interpretive
perspective, guided by the assumptions of the case study in which the in-depth
interview, the focus group and the content analysis are used as information
gathering techniques; Similarly, the applied analysis techniques revolve around
categorical summation, correspondence and models, and naturalistic
generalizations. The main findings indicate that, although Information and
Communication Technologies have been the support to give continuity to the
educational process, through virtual and online education, students state that
these modalities have not allowed them to achieve significant learning, taking
into account the preparation of homework, virtual classes, understanding the
subject, progress and monitoring of their professional training; particularly, of
those students who are in vulnerable environments, evidencing the increase of
the digital divide in these contexts.
Palabras Clave: Covid-19, brecha digital, educación virtual, educación en línea
y educación superior.
Keywords: Covid-19, digital divide, virtual education, online education and
higher education.
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
453
Introducción
La pandemia por Covid-19, sin lugar a dudas, ha intensificado la manera de
relacionarnos e interactuar en sociedad a través de las Tecnologías de la
Información y la Comunicación (TIC); así, las actividades económicas, políticas
y sociales, incluidas las educativas, se han llevado a cabo por medio de los
dispositivos de cómputo y las aplicaciones móviles, sustentadas por las
telecomunicaciones, para sobrellevar la epidemia que obligó a los gobiernos a
decretar el cese de labores y el cierre de las organizaciones de los diversos
sectores sociales.
Los centros educativos de todos los niveles, acatando las disposiciones
oficiales, cerraron sus instalaciones, afectando al 91.3% del total de
estudiantes matriculados en el mundo, es decir, más de 1.500 millones de
personas se quedaron sin poder asistir a sus clases presenciales (UNESCO,
2020) y 63 millones de maestros dejaron de laborar en las aulas (IESALC,
2020). En consecuencia, se estableció la continuidad de la formación
académica mediante la modalidad de educación virtual y en línea.
En el caso particular de la educación superior, la suspensión de actividades
docentes presenciales ocasionó que éstas se transfirieran de modo inmediato a
un formato digital. Específicamente, en las universidades públicas mexicanas
quedó evidenciada la falta de preparación para hacer frente al cambio
imprevisto y obligatorio de transferir los contenidos curriculares a un modelo
educativo completamente virtual, aunado a los cambios a los que se vieron
forzados los profesores para impartir sus clases en esta modalidad. Sin
embargo, no puede pretenderse que estas acciones, urgentes y sobrevenidas,
sean similares en experiencia, planificación y desarrollo a las propuestas que
están específicamente diseñadas desde su concepción para impartirse online
(Hodges, Moore, Lockee, Trust y Bond, 2020).
Por ello, esta investigación tiene por objetivo explicar el proceso educativo
virtual llevado a cabo en el periodo de confinamiento, derivado de la crisis
sanitaria, desde la opinión de estudiantes universitarios de una Institución de
Educación Superior pública mexicana, considerando el uso de las TIC en
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
454
tareas, clases, entendimiento del tema, progreso y seguimiento de la
asignatura.
El contexto del estudio se circunscribe en la Universidad Autónoma de
Chiapas, xico, con estudiantes de la Licenciatura en sistemas
computacionales y Licenciatura en ingeniería en desarrollo y tecnología de
software, a través de un estudio de casos que integra la entrevista en
profundidad, el grupo focal y el análisis de contenido como técnicas de
recopilación de información. El tratamiento analítico de los datos se lleva a
cabo mediante las técnicas de suma categórica o interpretación directa,
correspondencia y modelos y generalizaciones naturalistas. De este modo, se
procede ante la realidad del objeto de estudio que nos interesa analizar.
Marco teórico
La educación virtual en el proceso de enseñanza y aprendizaje universitario por
la pandemia Covid-19.
La educación virtual ha sido una estrategia considerada en las políticas
educativas para incrementar la matrícula en educación superior y llegar a las
poblaciones que no pueden permitirse estudiar presencialmente por diversas
causas tales como la movilidad, la situación económica, el ambiente familiar,
las condiciones físicas o la ubicación geográfica. Particularmente, en América
Latina, la tasa de matriculados en este nivel educativo se encuentra muy por
debajo de la media de los países desarrollados, lo que ha ocasionado que los
gobiernos de las naciones en vías de desarrollo establezcan la modalidad de
educación virtual y en línea como un medio para proporcionar formación
profesional a la población vulnerable, en procura de revertir las desigualdades
sociales y generar el desarrollo de las regiones.
La educación virtual tiene por objetivo planificar, desarrollar e implementar
procesos educativos mediados por las Tecnologías de Información y la
Comunicación (TIC), sin que los agentes de la educación involucrados tengan
que coincidir en presencia física, tiempo y espacio, puesto que todas las
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
455
actividades formativas se realizan desde el ciberespacio. Esta modalidad
educativa ha sido integrada a las universidades desde hace más de dos
décadas, como una alternativa para formarse profesionalmente. No obstante,
por la situación de contingencia sanitaria originada por el virus SARS-CoV-2,
causante de la enfermedad COVID-19, las instituciones de educación superior
se vieron obligadas a transferir sus contenidos curriculares a plataformas
tecnológicas para dar continuidad al proceso de enseñanza y aprendizaje
desde los hogares, y tratar de llegar a buen término el ciclo escolar.
Diversos estudios y posicionamientos han surgido a partir del origen de la
pandemia que nos lleva a conocer sobre las prácticas pedagógicas efectuadas
en la virtualidad total. Así, García, Corell, Avella y Grande (2020, pág. 1)
señalan que:
En el ámbito universitario la transformación urgente de las clases presenciales
a un formato online se ha llevado a cabo de una forma que se puede calificar
como aceptable en términos generales, si bien las medidas tomadas se han
ajustado a la urgencia y no a una planificación pensada a priori para impartir
una asignatura con una metodología completamente online.
Igualmente, dichos autores señalan que el proceso se ha dado respondiendo a
la emergencia, sin tiempo para efectuar un rediseño integral de las asignaturas,
las cuales fueron pensadas para ser impartidas y cursadas de forma presencial
y sin poder planificar ni asegurar que todos los profesores y los estudiantes
contaran con los medios tecnológicos mínimos requeridos, las competencias
digitales necesarias y unas actitudes proclives al cambio. En este sentido,
Brown y Salmi (2020) manifiestan que, frente a la transición a la educación en
línea en las universidades, la mayoría, no están bien preparadas para hacer
este cambio de manera rápida y abrupta. Por ello, han ocurrido muchas
confusiones e improvisaciones, aunque los administradores, profesores y
estudiantes luchan para implementar aprendizajes en línea de manera amplia y
eficaz.
Sin duda, nos encontramos en un punto de inflexión en el que los liderazgos
pedagógicos serán capaces de establecer políticas educacionales que se
apliquen en el corto, mediano y largo plazo, con acciones puntuales como la
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
456
revisión de las mallas curriculares para la formación inicial en carreras
pedagógicas, atendiendo a la adquisición de herramientas de gestión
tecnológica, conocimientos técnico-pedagógicos para incorporar prácticas de
aprendizaje colaborativo y aprendizaje basado en proyectos, que permitan
flexibilidad en los procesos curriculares, así como la transversalidad en los
objetivos de aprendizaje (Arriagada, 2020).
En relación con la organización de las clases, algunas instituciones han
establecido horarios completos de clases virtuales, adaptando lo presencial a lo
virtual, con el propósito de mantener el avance del currículum y focalizar su
preocupación en los contenidos, centrándose en la cuestión de la
temporalización (Muñoz & Lluch,2020). En cambio, otros centros educativos
han dejado que los profesores y los estudiantes se organicen en cuanto a los
horarios, dejando en manos del profesorado la disposición de las actividades y
la plataforma tecnológica que empleen, en procura del avance de los
contenidos académicos. Un elemento relevante a considerar es la escogencia
por parte del profesorado de las herramientas tecnológicas que integran a su
enseñanza, poniendo de manifiesto la falta de infraestructura tecnológica
institucional para mediar el proceso educativo virtual.
Por otra parte, García y Beas (2020) señalan que la pandemia por COVID-19
ha llevado a considerar un panorama de incertidumbre y reflexión en diferentes
aspectos de la vida, tanto en la responsabilidad y el valor para el cuidado de la
salud, como en abrir los ojos ante una oportunidad de oro para aprovechar el
uso de la tecnología en el avance de las diferentes tareas que nos atañen
diariamente. Con respecto a la salud, ha permitido estimular la telesalud
mediante el uso de diferentes herramientas de acuerdo con las disponibilidades
de los diferentes escenarios.
En congruencia con lo expuesto, Chaet, Clearfield y Sabin (2017) manifiestan
que el habilitamiento de sistemas a distancia permitirán al alumno familiarizarse
con la “telesalud” y las nuevas vías para ofrecer cuidados sanitarios. La
relación a distancia profesor-alumno ha supuesto, para el futuro profesional, un
ensayo magnífico de lo que será una relación a distancia médico-paciente. Se
ha buscado, incluso de manera obsesiva, la tecnología adecuada y las
telecomunicaciones para facilitar una relación directa, incluso “cara a cara”
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
457
entre profesor y estudiante; y esto puede ser muy aprovechable en el futuro
como expresión de que la comunicación interactiva a distancia entre médico y
paciente ha venido para incorporarse a la práctica clínica habitual (Núñez,
2020).
Como se puede apreciar, el posicionamiento sobre las prácticas pedagógicas
llevadas a cabo online, desde diferentes contextos y disciplinas nos revela que
la situación escolar es y permanecerá compleja para todos los agentes de la
educación profesores, estudiantes, personal de apoyo y directivos-,
constituyendo nuevos y grandes desafíos en el que el liderazgo pedagógico y
la actitud del docente serán las principales estrategias para hacer frente a estos
retos significativos que, repentinamente, se tuvieron que asumir.
En el caso de México, los desafíos y retos ante la contingencia de salud no han
sido menores, y son de diversa índole, ya sean de corte tecnológico o de
formación de docentes y estudiantes para el uso y manejo de las plataformas
digitales (Barrón, 2020); y de acuerdo con Alcántara (2020, pág. 75):
La pandemia de covid-19 ha puesto de manifiesto las carencias de nuestras
instituciones en materia de infraestructura y de formación del personal
académico para llevar a cabo, de manera satisfactoria, la educación en línea.
También ha exhibido de manera clara las enormes desigualdades que existen
entre la población estudiantil, las cuales hacen temer que la brecha digital y la
del aprendizaje se puedan seguir ensanchando.
Asimismo, Chehaibar (2020) manifiesta que las instituciones escolares han
mantenido, por demasiado tiempo, formas de organización y estrategias de
funcionamiento que hoy se evidencian anquilosadas y rígidas para dar cauce a
nuevas y renovadas rutas de actuación ante las circunstancias de aislamiento
físico que esta pandemia ha impuesto.
Encima, tan solo el 45 por ciento de los mexicanos cuenta con una
computadora y el 53 por ciento tiene acceso a internet en casa (INEGI, 2018a).
Específicamente en la educación superior, el 18 por ciento de estudiantes, en
promedio, no tiene acceso a dichos servicios, es decir, uno de cada cinco no
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
458
puede seguir las clases en línea desde sus casas (INEGI, 2018b). De manera
que, algunos de los factores que condicionan el acceso a una educación de
calidad en línea son: la clase social, la raza, la etnia, el género, la ubicación
geográfica y el tipo de institución educativa (Lloyd, 2020). Es así, como se pone
de manifiesto que, en el ámbito de la política pública y el financiamiento en
México, es clara la falta de una dirección decidida de inversión en el sector que
dote de condiciones de infraestructura y equipamiento justamente a quienes
menos tienen, y que también, abra márgenes de protagonismo a las
autoridades educativas estatales, a las propias escuelas y a sus maestros
(Chehaibar, 2020).
Por otro lado, los docentes tuvieron que, súbitamente, modificar o encoger sus
métodos de enseñanza y recursos didácticos para enfrentarse a una nueva
experiencia y al cambio tan drástico que representa el proceso de enseñanza
en una modalidad virtual, a través de plataformas digitales, para muchos de
ellos, desconocidas (Ruíz, 2020). No tuvieron tiempo siquiera de recibir una
capacitación básica sobre el manejo de algunas herramientas tecnológicas y,
en cambio, fue abrumador el enorme despliegue de alguna de ellas, que tenían
que utilizar, como Moodle, Zoom Meeting, Skype, Google Hangouts, Google
Meeting, Google Classroom, Blackboard, inclusive el WhatsApp a través de la
comunicación telefónica grupal, que por la importancia estratégica que están
teniendo en estos días de aislamiento social, comenzaron a ser parte no sólo
de su léxico didáctico, sino también de su práctica docente (Sánchez et al.,
2020).
De este modo, en el actual escenario, los docentes de todos los niveles
educacionales, debieron forzosamente incorporar nuevas herramientas, más
allá del uso de las Tics, o algún software. Sin mayor preparación, la pandemia
los obligó a salir del papel, las evidencias, y todos los instrumentos de
evaluación formativos, sumativos, planificación clase a clase, entre otras
prácticas, para adentrarse en las plataformas de educación a distancia, la cual
no discrimina entre profesores recién egresados, de aquellos que esperan su
retiro y las mallas curriculares de formación (Arriagada, 2020).
En cuanto a los estudiantes, no se identificaron investigaciones que detallen
significativamente las actividades y acciones que han tenido que llevar a cabo
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
459
para el aprendizaje de los contenidos, tales como la realización de tareas,
tomado de clases, entendimiento del tema, progreso y seguimiento de su
aprendizaje mediante las TIC. Por ello, la importancia de esta investigación
radica en que intenta explicar el proceso seguido por alumnos universitarios y
las actividades que han tenido que efectuar para continuar con su proceso de
formativo en completa virtualidad desde sus hogares.
Metodología
Paradigma y método
Para proceder ante la realidad de nuestro interés, se diseña un modelo
metodológico desde la perspectiva interpretativa o cualitativa debido a que
buscamos la comprensión e interpretación, de primera mano, de los agentes de
la educación que forman parte del objeto de estudio; en nuestro caso, los
estudiantes universitarios que se han visto obligados a trasladar su proceso de
aprendizaje de manera presencial a la virtualidad. Así, pretendemos la
comprensión del fenómeno desde la consideración de una amplia variedad de
contextos: temporales, espaciales, históricos, políticos, económicos, culturales,
sociales y personales (Stake, 2007).
El método aplicado corresponde con el estudio de casos puesto que permite
estudiar la particularidad y la complejidad de un caso singular, para llegar a
comprender su actividad en circunstancias importantes (Stake, 2007), como lo
es el análisis del proceso educativo virtual llevado a cabo por estudiantes
universitarios de una institución de educación superior mexicana, durante el
periodo de confinamiento.
Se trata de un estudio de caso intrínseco ya que nos interesa estudiar el
proceso de enseñanza y aprendizaje virtual, considerando la manera en que
los estudiantes afrontaron sus actividades académicas relacionadas con las
tareas, las clases, el entendimiento del tema, el progreso y el seguimiento de
este proceso durante su aprendizaje en casa.
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
460
Población y participantes de la investigación
La población se circunscribe a estudiantes de la Universidad Autónoma de
Chiapas, México, pertenecientes a dos carreras del área de ciencias de la
computación: Licenciatura en ingeniería y desarrollo en tecnología de software,
y Licenciatura en sistemas computacionales. La selección de los participantes
se realiza tomando en cuenta los supuestos del muestreo basado en criterios,
que indica la escogencia de los participantes con base en una serie de criterios
que son necesarios o muy convenientes para los fines que persigue la
investigación. Además, según Goetz y LeCompte (1988) este tipo de muestreo
establece que únicamente se requiere que el investigador elabore un listado de
los atributos esenciales que deben poseer los sujetos de estudio para, a
continuación, localizar en el mundo real alguno que se ajuste a ellos. En
consecuencia, se trabaja con 12 estudiantes de las carreras en referencia,
distribuidos tal como se visualiza en la tabla 1:
Tabla 1. Participantes de la investigación
Carrera
Mujeres
Hombres
No. de
estudiantes
Sistemas computacionales
3
6
9
Ingeniería en desarrollo y
tecnología de software
2
5
7
Total
5
11
16
Fuente: elaboración propia (2020)
Técnicas de recolección de información
Las técnicas implementadas corresponden con la entrevista en profundidad, el
grupo focal y el análisis de contenido. Las primeras dos técnicas fueron
desarrolladas de forma virtual, a través de la herramienta Zoom, con los
participantes del estudio. Para la implementación de la entrevista en
profundidad se elaboró una guía de entrevista que considera 7 ejes: cambios
significativos por la transferencia del proceso educativo de la modalidad
presencial a la virtual, tipos y modos de interacción con los agentes de la
educación, realización de tareas y actividades de modo virtual, herramientas
tecnológicas empleadas para llevar a cabo el proceso educativo, entendimiento
de los temas desarrollados desde la virtualidad y autoevaluación sobre el
aprendizaje en esta modalidad educativa. En función a los ejes expuestos, se
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
461
llevaron a cabo 16 entrevistas virtuales con una duración de entre 40 y 65
minutos. Dichas entrevistas se realizaron en el mes de junio y julio del 2020.
En la segunda técnica, grupo focal, también empleamos una guía para recabar
información del grupo, considerando los ejes temáticos expuestos, con la
diferencia de que los estudiantes al interactuar en forma colectiva se comportan
de manera diferente, lo que conlleva a recopilar información adicional a la
obtenida con la técnica de entrevista en profundidad. De acuerdo con Ortí
(1989) la técnica permite recabar, a través de reuniones de grupo, de carácter y
naturaleza eminentemente sociológicos, las representaciones ideológicas, los
valores, las formaciones imaginarias y afectivas de un determinado estrato o
clase, que en nuestro caso alude a estudiantes del área de ciencias de la
computación. Así, se conformaron dos grupos, con 8 estudiantes, cada uno, y
se realizaron dos sesiones grupales virtuales con cada grupo, de
aproximadamente 90 minutos. En total, se llevaron a cabo 4 sesiones grupales
virtuales durante el mes de julio y agosto del 2020.
La tercera técnica, el análisis de contenido, se orienta a la representación, la
organización y la localización de la información”, (Sánchez & Vega, 2003, p.53)
del tema que nos ocupa; esta información clasificada y analizada, proveniente
de fuentes académicas y científicas es la que proporciona el sustento teórico y
metodológico de nuestra investigación. Dicha información ha sido recaudada
desde distintas fuentes primarias y secundarias tanto físicas como digitales -
libros, artículos de revista, base de datos científicas y académicas, materiales
audiovisuales-. En total, se consultaron y revisaron 42 documentos.
La tabla 2 resume la aplicación de las técnicas de recolección de información
mencionadas:
Tabla 2. Técnicas de recolección de información aplicadas
Técnica
No. de
sesiones/
documentos
Duración
Entrevista en profundidad
(virtual)
16
40 - 65
minutos
Grupo focal (virtual)
4
90 minutos
Análisis de contenido
42
9 meses
Fuente: elaboración propia (2020)
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
462
Tratamiento analítico de la información
La información recopilada ha seguido un estricto tratamiento analítico desde su
inicio a través de las técnicas de suma categórica o interpretación directa,
correspondencia y modelos y generalizaciones naturalistas. Mediante la
primera cnica, suma categórica, se alcanzan los primeros significados del
caso con base en la interpretación de las opiniones individuales y la suma de
ellas hasta que se pueda decir algo sobre estas como conjunto o clase (Stake,
1999), es decir, se forman las primeras categorías y propiedades.
Una vez esbozadas estas primeras significaciones, procedimos a consolidar
cada categoría en función de sus propiedades, implementando la técnica de
correspondencia y modelos, la cual busca un significado articulando modelos
que tengan consistencia en determinadas condiciones a lo que se denomina
correspondencia. De este modo, establecimos 5 categorías con sus respectivas
propiedades las cuales van dando luz a nuestro objeto de estudio.
Finalmente, mediante nuestra tercera técnica analítica empleada, las
generalizaciones naturalistas, establecimos los detalles y conclusiones de las
cinco categorías surgidas que nos permitieron llegar a la saturación teórica, lo
cual significa que hemos organizado, comprendido e interpretado la
información recabada hasta el punto de alcanzar resultados consistentes con
base en la evidencia empírica surgida en el estudio. Dichos resultados son
presentados detalladamente en el siguiente apartado.
Resultados
Las categorías surgidas se relacionan con los cambios significativos
acontecidos por el transitar de la presencialidad a la virtualidad en el hecho
educativo, las interacciones entre los agentes de la educación, el desarrollo de
actividades y tareas desde la virtualidad, la comprensión de las temáticas por
parte del estudiantado y el progreso en el aprendizaje desde esta modalidad
educativa. La figura 1 presenta dichas categorizaciones con sus propiedades:
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
463
Inexperiencia docente para impartir clases virtuales
Creatividad docente para el desarrollo de contenidos curriculares
Dificultad de concentración en el proceso de aprendizaje
Reducción del número y tiempo de clases
Sensación de aprendizaje insatisfactorio
Excesivo incremento de actividades y tareas
Comodidad y reducción de gastos
Organización y autodisciplina
Decremento de calificaciones o notas
Falta de conectividad
Falta de recursos financieros para costear la conectividad
Impartición de clases totalmente teóricas, sin prácticas
1) Cambios significativos al transitar de las
clases presenciales a las virtuales
Herramientas tecnológicas para la comunicación
Comunicación limitada entre los profesores y los estudiantes
Tutoriales de los profesores como medio de asesoría
Tiempo limitado del profesor
Falta de confianza por parte de los estudiantes para comunicarse
durante la clase
2) Interacciones entre los agentes de la
educación
Organización para lograr el aprendizaje
Desarrollo de disciplina
Familiaridad con algunas actividades
Actividades no planificadas por los docentes
3) Desarrollo de tareas y actividades
En función de la estrategia de enseñanza
Con base en los contenidos curriculares
Mediante pares
Aprendizaje limitado
Focalizarse más en clases
Aclaración de dudas con profesores
4) Comprensión de los temas curriculares
Progreso reducido pero aceptable
Con base en la aplicación de conocimientos
Brecha digital
5) Progreso en el aprendizaje
Figura 1. Categorías y propiedades del proceso educativo virtual originado por la crisis sanitaria
Fuente: elaboración propia (2020)
Cambios significativos al transitar de las clases presenciales a las virtuales
En relación con la primera categoría, los estudiantes indican que se ha
evidenciado la falta de experiencia de sus docentes en el manejo de entornos
virtuales de aprendizaje, lo que se traduce en el desarrollo de una enseñanza
diferente a la presencial, que no consigue alcanzar del todo, los objetivos de las
clases, proporcionando un sentimiento de insatisfacción entre el alumnado.
Esto se debe, principalmente, al débil desarrollo de competencias digitales por
parte de los docentes para elaborar contenidos digitales multimedia e
implementar disímiles herramientas TIC en el proceso de enseñanza y
aprendizaje tales como aplicaciones centradas en los contenidos curriculares,
entornos virtuales de aprendizaje, recursos abiertos de aprendizaje, entre otras.
Por otra parte, los estudiantes señalan que, pese a la inexperiencia de sus
docentes en el uso de estos contextos virtuales, los profesores se han
caracterizado por poner en práctica su creatividad en el desarrollo de las clases
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
464
y contenidos empleando las pocas herramientas tecnológicas que conocen, en
la que se resalta su buena actitud y disposición por continuar, en todo momento
con el proceso formativo virtual. En este sentido, los estudiantes, también, han
tenido que ser creativos para continuar con su proceso educativo, haciendo
acopio de su ingenio para poder tomar sus clases virtuales cuando no cuentan
con los elementos necesarios para hacerlo, tal como lo manifiesta el estudiante
11:
Mis padres son humildes (pobres), no tenemos suficiente dinero para pagar el
servicio de datos de mi teléfono, por eso, no podía estar en todas las video
clases, entonces, le llamaba a un compañero y le pedía que me pusiera en
altavoz la videoconferencia de la clase que él estaba viendo para que yo
pudiera, al menos, escucharla (comunicación personal, 17 de junio de 2020).
En concordancia con lo expuesto, la segunda característica de esta categoría
distingue la dificultad que presentan los estudiantes para continuar con su
proceso de aprendizaje, concentrarse o llevar el hilo de los temas desarrollados
en las clases en nea y realizar las tareas y las evaluaciones. La primera
dificultad se debe básicamente a la falta de conectividad por la región en la que
se encuentren, o debido a la falta de recursos económicos para costearla,
sobre todo de aquellos estudiantes que viven en comunidades rurales, en el
que el acceso a la red de datos es limitada o nula, es decir, se trata de
estudiantes en situación de vulnerabilidad.
La segunda dificultad, la poca atención o concentración de los alumnos durante
el proceso académico, se debe a la falta de espacios propicios dentro de su
hogar, aunado al confinamiento en el que se encuentran con todos los
miembros de su familia; tal situación, no les permite contar con un lugar privado
y silencioso que haga posible abstraerse para el aprendizaje. No obstante, los
estudiantes señalan como beneficio la reducción de costos al no tener que
asistir presencialmente al centro educativo y la comodidad de no trasladarse a
la escuela.
Así también, en esta modalidad educativa se ha reducido considerablemente el
número de sesiones de clases y el tiempo destinado a su impartición, lo que
propicia que los profesores incrementen la cantidad de actividades y tareas con
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
465
la finalidad de abarcar los contenidos curriculares estipulados en los programas
de estudio. Sin embargo, los estudiantes manifiestan que este objetivo no se
logra con el hecho de aumentar notoriamente el número de tareas, y que
deberían plantearse otras estrategias; por ejemplo, aumentar las sesiones
síncronas y decrementar las asíncronas. Igualmente, la organización de los
alumnos en sus actividades académicas y la autodisciplina para formarse en el
ambiente virtual, es otro de los rasgos identificados, puesto que ellos deben
hacer un sobre esfuerzo para estudiar desde casa, organizando los horarios de
clases como si se trataran de lecciones presenciales y destinando más tiempo
para la elaboración de tareas, tanto individuales como colectivas.
El desarrollo de clases más teóricas que prácticas es otra particularidad surgida
en esta categoría que abona a la insatisfacción de los estudiantes en su
aprendizaje debido que el contexto virtual no sustituye, de ninguna manera,
para algunas carreras, las prácticas realizadas en los laboratorios, las cuales
consolidan los conocimientos de los estudiantes al conjuntar los saberes
teóricos con los prácticos. Lo expuesto, ha ocasionado, en una minoría de
estudiantes la disminución de sus calificaciones o notas.
Interacciones entre los agentes de la educación
La categoría dos presenta las herramientas tecnológicas empleadas para
establecer comunicación entre los agentes educativos, es decir, entre los
profesores y los estudiantes, inclusive, entre los propios estudiantes; así, se
identifica que las herramientas más utilizadas para llevar a cabo el proceso de
enseñanza y aprendizaje virtual son Classroom, Edmodo, Moodle, Zoom, Meet,
Gmail, Hotmail, Driver, WhatsApp, Facebook y Youtube; además, se estableció
un servicio de líneas telefónicas de contacto institucional para asesorar a los
estudiantes sobre procedimientos académicos y administrativos.
Pese a que se evidencia una variedad de herramientas tecnológicas para la
comunicación, los estudiantes manifiestan que la disposición de los profesores
respecto al tiempo es limitada y está sujeta a los horarios que los docentes
estipulan, los cuales suelen ser variados. Muchos de los profesores, solventan
esta limitante con la generación y publicación de videos tutoriales que los
alumnos pueden consultar desde los ambientes virtuales de aprendizaje
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
466
cuando lo requieran y despejar dudas sobre un tema en particular; sin
embargo, la comunicación por los canales síncronos sigue siendo restringida
debido a que los estudiantes no plantean consultas y comentarios sobre los
temas abordados en las clases virtuales, ni de las actividades y las tareas
encomendadas.
Desarrollo de tareas y actividades
En relación con la categoría acerca del desarrollo de tareas y actividades en el
formato virtual, los estudiantes manifiestan que han tenido que optimizar la
organización de su tiempo para que puedan atender sus actividades
académicas en este formato educativo, lo cual ha ocasionado que se
conviertan en estudiantes disciplinados, autodidactas con la finalidad de
elaborar las tareas y actividades relacionadas con los temas curriculares.
En este sentido, los alumnos de semestres posteriores al primero, reconocen
como una ventaja el estar familiarizados con la estructura de gran parte de las
tareas y los proyectos que ya han realizado en ciclos lectivos anteriores; no
obstante, los alumnos manifiestan que existen docentes que no planean y
comunican debidamente lo que esperan que realicen los estudiantes en
algunas actividades, es decir, los profesores no expresan claramente sus
indicaciones sobre las tareas encomendadas; en consecuencia, dichas
actividades tienden a ser confusas y hacen que los alumnos dupliquen
esfuerzos innecesarios.
Para el encargo y la entrega de los trabajos, los profesores y los estudiantes
utilizan los ambientes virtuales de aprendizajes expuestos, las cuentas de
correo electrónico, o en el caso de las clases en línea, los profesores explican
la actividad y los alumnos hacen entrega de la tarea compartiendo sus
pantallas. De igual manera, las tareas que son realizadas en el cuaderno son
entregadas mediante fotografías a través de herramientas asíncronas.
Comprensión de los temas curriculares
En relación con la cuarta categoría, las evidencias indican que se genera en
función de la estrategia de enseñanza que diseña y pone en práctica el docente
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
467
en la virtualidad, en la que la mayor comprensión de los temas por parte de los
estudiantes se da por medio de la impartición de clases mediante
videoconferencias. Otra de las características que surge de esta categoría, es
que el nivel de entendimiento se relaciona con los contenidos curriculares de
las asignaturas de las carreras, es decir, hay una comprensión mayor en
materias que son teóricas, que aquellas que son del ámbito de las
matemáticas, la programación, el desarrollo de software y las que requieren de
prácticas de laboratorio, las cuales no han podido ser sustituidas a través de
las clases virtuales o en línea.
La comprensión de los temas, actividades y tareas, de igual forma, se
desarrolla a través de la explicación detallada de estas entre los propios
estudiantes, quienes fungen como asesores académicos para solventar dudas
que aún persisten y que no han podido disiparse en clases o través de las
demás fuentes de comunicación establecidas por el docente para la aclaración
de dudas. Sin embargo, es importante señalar que, si bien los profesores
presentan disponibilidad para aclarar dudas y atender comentarios mediante
las herramientas tecnológicas estipuladas, son los propios estudiantes quienes
muchas veces no externan sus preguntas ya sea de forma síncrona o
asíncrona. Por ello, los alumnos tienen que enfocarse más en las explicaciones
hechas en las clases y en las indicaciones que les hacen llegar sus profesores
en las plataformas tecnológicas.
Progreso en el aprendizaje
La última categoría surgida del trabajo de campo hace referencia al progreso
del estudiante en su aprendizaje desde la modalidad virtual, la cual explica que
los alumnos no se sienten a gusto con esta modalidad puesto que la
consideran tediosa, pasiva y poco eficiente para lograr un de aprendizaje
significativo. Los alumnos señalan que el progreso en la conformación de sus
saberes es reducido pero aceptable, es decir, no logran comprender en su
totalidad los temas desarrollados de esta forma, pero las temáticas entendidas
se traducen en una construcción de conocimientos aceptables.
De igual modo, manifiestan que ha habido una evolución en la adquisición de
sus conocimientos desde que tuvieron que cambiar de modalidad educativa: “al
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
468
principio era un aprendizaje deficiente, pero al organizarme y adaptarme a las
nuevas formas de enseñanza, mejoré mi comprensión en cada una de las
asignaturas. La buena actitud, también cuenta para mejorar (Estudiante 7,
comunicación personal, 29 de junio de 2020). Asimismo, los alumnos señalan
que podían identificar el grado de avance en su formación con base en la
aplicación que le daban a los conocimientos desarrollados desde la virtualidad;
así lo expresa el estudiante 3:
Me percato del entendimiento que tengo de los temas de las materias que
curso dependiendo de mi nivel de conocimiento para resolver las tareas,
actividades y, obviamente, las evaluaciones; ahí me doy cuenta de lo que no
comprendí en las clases, de los temas en los que tengo deficiencia y busco
entenderlos de distintas maneras; una de ellas, la principal, es investigando
(comunicación personal, 3 de julio de 2020).
Finalmente, el concepto de brecha digital aparece en todas las categorías
anteriores, aunque en esta se subraya considerablemente al evidenciar nuestra
investigación que la comprensión de los temas, en particular, y la formación de
los profesionales, en general, en el área de las ciencias de la computación está
relacionada con la situación socioeconómica de la población estudiantil, lo cual
ha quedado claro en esta pandemia en la que los estudiantes de extracción
económica baja, proveniente de comunidades rurales y las estudiantes que son
madres solteras, son los que presentan mayores adversidades para continuar
con su formación universitaria. Y es aquí, donde precisamente profesores,
instituciones educativas y autoridades gubernamentales deben dirigir la mirada
para ofrecer alternativas que permitan a la población de este contexto continuar
con su formación profesional.
Discusión y conclusiones
Inminentemente, la crisis sanitaria que padecemos ha obligado a los actores
educativos del contexto superior a plantear una forma diferente de llevar a cabo
el proceso de enseñanza y aprendizaje mediante las Tecnologías de la
Información y la Comunicación (TIC); en este transitar, ha quedado evidenciado
desde el punto de vista de los estudiantes que la educación virtual no ha sido
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
469
suficiente para construir un aprendizaje significativo. De acuerdo con los
estudiantes, la presencialidad no puede ser sustituida por los medios
tecnológicos puesto que se necesita la afectividad y la cercanía que provee la
educación presencial. Al respecto, los alumnos manifiestan que la modalidad
educativa presencial influye en su estado de ánimo y en su motivación para el
aprendizaje a través de la convivencia que se realiza en el aula con profesores
y compañeros de clases.
Así también, la inexperiencia docente para trasladar abruptamente las clases
que han sido planificadas para ser impartidas de manera presencial a un
formato virtual, ha constituido un detonante para la insatisfacción y estrés tanto
de profesores como de estudiantes, quienes no consiguen adecuarse
completamente a esta nueva modalidad en las que se han visto forzados a
trabajar. En este sentido, existe una confusión entre los agentes de la
educación, principalmente por parte de los profesores, sobre cómo se debe
continuar con la formación educativa: si el proceso educativo debe proseguirse
en la modalidad virtual, en la modalidad en línea o en ambas, puesto que estos
conceptos se basan en nociones disímiles.
La educación virtual tiene como principal característica que es asincrónica, es
decir, no es necesario que los profesores y los alumnos coincidan en un horario
específico; aquí, los agentes de la educación llevan a cabo el proceso
educativo mediante algún ambiente virtual de aprendizaje o plataforma
tecnológica en la que los profesores establecen los materiales educativos, las
actividades de aprendizaje, las evaluaciones, entre otras, y los alumnos se
comunican con los profesores a través de herramientas que la misma
plataforma les proporcionan tales como foros, mensajes privados o correos
electrónicos.
Por otro lado, la educación en línea posee las características propias de la
educación virtual, con la diferencia de que es sincrónica, lo cual significa que el
profesor y los estudiantes deben de coincidir en un horario estipulado. De este
modo, se emplean otro tipo de herramientas tecnológicas para realizar
videoconferencias grupales debido a que las clases son en línea o en vivo, por
ello el planteamiento y la resolución de cuestionamientos o dudas se realiza en
tiempo real; una ventaja adicional de esta modalidad es que las clases
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
470
impartidas por video pueden ser grabadas para compartirlas posteriormente
con los alumnos.
Con esta falta de directrices académicas los docentes han tenido que hacer
frente a una situación muy particular, en la que se destaca el compromiso, la
motivación y el entusiasmo para continuar con su labor, pese a su
inexperiencia, y en la que, además, muchos de ellos han tenido que exponer su
intimidad al impartir clases en línea desde los espacios de su hogar. No
obstante, vislumbramos una clara incertidumbre de viva voz de los estudiantes
sobre el tema de la calidad educativa generada en estas modalidades, por lo
que es necesario efectuar más investigaciones que nos permitan dar luz sobre
este proceso.
Finalmente, manifestamos que la continuidad del proceso formativo
universitario ha sido posible gracias a las posibilidades que la educación virtual
y la educación en línea ofrecen, aunque nuestro estudio ha evidenciado que el
traslado imprevisto de las clases presenciales a virtuales -sin considerar la
capacitación docente necesaria para el desarrollo de estrategias educativas
desde la virtualidad total y para la elaboración de materiales didácticos digitales
o contenidos multimedia- no ha sido efectiva en el aprendizaje de los alumnos;
en particular, de los estudiantes que poseen un entorno vulnerable en el ámbito
socioeconómico, regional y de género, en el que ha quedado expuesto que la
brecha digital ha crecido en estos contextos.
Referencias bibliográficas
Alcántara, A. (2020). Educación superior y COVID-19: una perspectiva
comparada. En Educación y pandemia, una visión académica. (pp. 75-
82). Universidad Nacional Autónoma de México.
Arriagada, P. (2020). Pandemia Covid-19: Educación a Distancia. O las
Distancias en la Educación. Revista Internacional de Educación para la
Justicia Social, 9 (3), 1-3.
https://revistas.uam.es/riejs/article/view/12396/12222
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
471
Barrón, M. C. (2020). La educación en línea. Transiciones y disrupciones. En
Educación y pandemia, una visión académica. (pp. 66-74). Universidad
Nacional Autónoma de México.
Brown, C. & J. Salmi (2020, 20 de mayo), Putting fairness at the heart of higher
education.
https://www.universityworldnews.com/post.php?story=202004170945237
29
Chaet, D., Clearfield, R., Sabin, J.E. et al. Ethical practice in Telehealth and
Telemedicine. J GEN INTERN MED 32, 11361140 (2017).
https://doi.org/10.1007/s11606-017-4082-2
Chehaibar, M. L. (2020). Flexibilidad curricular. Tensiones en tiempos de
pandemia. En Educación y pandemia, una visión académica. (pp. 83-91).
Universidad Nacional Autónoma de México.
García, H. A. & Beas, L. R. (2020). La enseñanza en los programas
académicos y quirúrgicos en tiempos de COVID-19. Revista Mexicana
de Urología, 80 (2), 1-3.
https://www.revistamexicanadeurologia.org.mx/index.php/rmu/article/vie
w/622/843
García-Peñalvo, F. J., Corell, A., Abella-García, V., & Grande, M. (2020). La
evaluación online en la educación superior en tiempos de la COVID-19.
Education in the Knowledge Society, 21 (12), 1-26.
https://doi.org/10.14201/eks.23013
Goetz, J. & LeCompte, M. (1988). Etnografía y diseño cualitativo en
investigación educativa. Ediciones Morata, S.A.
Hodges, C.,Moore, S.,Lockee, B.,Trust, T. & Bond, A. (2020). The difference
between emergency remote teaching and online learning. Educause
Review. https://bit.ly/3b0Nzx7
Instituto Internacional para la Educación Superior en América Latina y el Caribe
(2020, 15 de mayo). El coronavirus-19 y la educación superior: impacto y
recomendaciones. http://www.iesalc.unesco.org/2020/04/02/el-
coronavirus-covid-19-y-la-educacion-superior-impacto-y-
recomendaciones/
Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (2018, 9 de mayo de
2020). Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de
la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2018.
https://www.inegi.org.mx/programas/dutih/2018/
Revista científica electrónica de Educación y Comunicación en la Sociedad del Conocimiento
Publicación en línea (Semestral) Granada (España) Época II Vol. 21 (2) Julio-Diciembre de 2021 ISSN: 1695-324X
https://revistaseug.ugr.es/index.php/eticanet
DOI: http://doi.org/10.30827/eticanet.v21i2.21780
472
Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (2018b, 9 de mayo de
2020). Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares
(ENIGH). 2018 Nueva serie.
https://www.inegi.org.mx/programas/enigh/nc/2018/
Lloyd, M. (2020). Desigualdades educativas y la brecha digital en tiempos de
COVID 19. En Educación y pandemia, una visión académica. (pp. 115-
121). Universidad Nacional Autónoma de México.
Muñoz, J. L. & LLuch, L. (2020). Educación y Covid-19: Colaboración de las
Familias y Tareas Escolares. Revista Internacional de Educación para la
Justicia Social, 9 (3), 1-17.
https://revistas.uam.es/riejs/article/view/12182/12058
Núñez, J. M. (2020). COVID-19 por SARS-Cov2 también ha afectado a la
Educación Médica. Revista Educación Médica, 21 (4), 261-264.
https://doi.org/10.1016/j.edumed.2020.06.001
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura. (2020, 17 de mayo). Education: From disruption to recovery.
https://en.unesco.org/covid19/educationresponse
Ortí, A. (1989). La apertura y el enfoque cualitativo o estructural: la entrevista
abierta y la discusión de grupo. En El Análisis de la realidad social (pp.
171-203). Alianza.
Ruíz, E. (2020). Robótica pedagógica móvil y pensamiento computacional. Una
propuesta de actividad lúdica. En Educación y pandemia, una visión
académica. (pp. 130-137). Universidad Nacional Autónoma de México.
Sánchez, M. & Vega, J. C. (2003). Algunos aspectos teórico-conceptuales
sobre el análisis documental y el análisis de información. Revista
Ciencias de la Información, 34 (2), 49-60.
https://biblat.unam.mx/hevila/Cienciasdelainformacion/2003/vol34/no2/5.
pdf
Sánchez, M., Martínez, A. M. P., Torres, R., De Agüero, M., Hernández, A. K.,
Benavides, M. A., Jaimes, C. A. & Rendón, V. J. (2020). Retos
educativos durante la pandemia de COVID-19: una encuesta a
profesores de la UNAM. Revista Digital Universitaria, 21 (2), 1-23.
https://www.revista.unam.mx/wp-content/uploads/AOP.pdf
Stake, R. (2007). Investigación con estudio de casos. Ediciones Morata, S. L.