Según Cobo (2009) las TIC permiten la adquisición, producción,
almacenamiento, tratamiento, comunicación, registro, acceso y presentación de
datos, información y contenidos (en forma alfanumérica, imágenes, videos,
sonidos, aromas, vibraciones, temperaturas, movimientos, acciones a
distancia).
Son una herramienta muy importante, gracias a estas llegamos a obtener una
mejor metodología para la adquisición de nuevos saberes a través de las varias
tecnologías creadas en la actualidad tenemos una alta relación con los temas
tratados para el conocimiento estudiantil.
Belloch (2015) menciona que: El uso de las TIC no conduce necesariamente a
la implementación de una determinada metodología de enseñanza/aprendizaje.
Las TIC se han ido integrando en el contexto educativo de manera progresiva,
Renovando poco a poco aquellas metodologías ambiguas, pero sin dejar de
lado la gran importancia que reflejan dentro de este proceso, no solo hacen
referencia a el cambio o renovación de las técnicas antes aplicadas, se basan
un poco más en la concentración y la atención que los estudiantes pueden
llegar a prestar al docente, ya que de eso dependerá su obtención de
conocimientos que están siendo transmitidos por el profesor.
Según Alarcón, Ramírez y Vilchez (2014), en consecuencia, el trabajo
educativo con las TIC consiste en el desarrollo de actividades encaminadas a
que los estudiantes las aprovechen para aprender con eficiencia y eficacia, es
decir, que mejoren su competencia escolar, aprovechando las oportunidades
de aprendizaje que les brinda las TIC al máximo.
Los estudiantes deben aprender a manejar y utilizar de manera adecuada cada
una de estas nuevas tecnologías ya que ayudarán a un mejor desenvolvimiento
académico. Generando nuevos profesionales con amplios saberes que
ejercerán su carrera y de tal manera ayudarán al desarrollo de la sociedad.
El uso de las TIC en la educación depende de múltiples factores
(infraestructuras, formación, actitudes, apoyo del equipo directivo, etc.), entre
los cuales el más relevante es el interés y la formación por parte del
profesorado, tanto a nivel instrumental como pedagógico (Belloch, 2015).